Formas de pago
En la mayoría de los sitios web que realizan comercio electrónico se puede pagar con una tarjeta VISA o Mastercard. En el formulario de compra nos solicitarán el número de la tarjeta, su caducidad y el código de control (tres números que están en la parte posterior). Los sistemas de verificación de tarjeta se encargan de transmitir los datos al banco de forma segura. Los más conocidos son Verisign, 3D Secure de Visa y Mastercard Securecode.
Tarjetas monedero
Son tarjetas de prepago en las que se carga el dinero que se quiera hasta el máximo que especifique la entidad bancaria. Se pueden utilizar en comercios tradicionales y tiendas de internet. Se pueden recargar directamente en los cajeros automáticos. Una ventaja importante es que sólo se puede perder el dinero que previamente se haya recargado.
Para utilizarla en una transacción de internet nos pedirán su número y la fecha de caducidad.
Tarjetas virtuales
No tienen soporte físico, y como las anteriores también se pueden cargar hasta una cantidad máxima. Sólo constan de un número y una fecha de caducidad. Por precaución conviene apuntarse esos datos en algún soporte seguro, de lo contrario no se podrá recargar en caso de pérdida.
Generalmente están certificadas por Visa o Mastercard y sirven para compras en páginas web y algunas compras a través del móvil.
El usuario puede establecer una fecha de caducidad, limitando con ello su uso.
Se ofrecen con identificación del usuario y también de forma anónima, el límite máximo de éstas últimas suele ser bastante menor a las anteriores.
Al igual que las anteriores, se expiden en las entidades bancarias, y en muchas se exige ser cliente de la misma.
El funcionamiento es similar al de una tarjeta Visa o Mastercard.
Servicios de prepago
Funcionan prácticamente como una tarjeta monedero. Para comprar con este sistema es preciso que el sitio web acepte esta forma de pago.
Las cuentas para comprar son gratuitas y la recarga también, pero tienen comisiones si se quiere retirar el dinero o realizar otra operación.
Hay que aportar los datos de una cuenta bancaria o de las tarjetas Visa o Mastarcard.
Ejemplos: Paypal. Epagado. No está de más una visita por estos sitios para conocer mejor su funcionamiento.
Pagos por móvil
Ya no se utiliza solamente el móvil para pagar las descargas de logos, melodías y juegos. Muchas páginas ofrecen esta posibilidad para cobrar sus contenidos. Un ejemplo claro es Softonic, que garantiza descargas de programas libres de virus enviando un mensaje sms.
Otras formas de pagoEn la mayoría de los sitios web que realizan comercio electrónico se puede pagar con una tarjeta VISA o Mastercard. En el formulario de compra nos solicitarán el número de la tarjeta, su caducidad y el código de control (tres números que están en la parte posterior). Los sistemas de verificación de tarjeta se encargan de transmitir los datos al banco de forma segura. Los más conocidos son Verisign, 3D Secure de Visa y Mastercard Securecode.
Tarjetas monedero
Son tarjetas de prepago en las que se carga el dinero que se quiera hasta el máximo que especifique la entidad bancaria. Se pueden utilizar en comercios tradicionales y tiendas de internet. Se pueden recargar directamente en los cajeros automáticos. Una ventaja importante es que sólo se puede perder el dinero que previamente se haya recargado.
Para utilizarla en una transacción de internet nos pedirán su número y la fecha de caducidad.
Tarjetas virtuales
No tienen soporte físico, y como las anteriores también se pueden cargar hasta una cantidad máxima. Sólo constan de un número y una fecha de caducidad. Por precaución conviene apuntarse esos datos en algún soporte seguro, de lo contrario no se podrá recargar en caso de pérdida.
Generalmente están certificadas por Visa o Mastercard y sirven para compras en páginas web y algunas compras a través del móvil.
El usuario puede establecer una fecha de caducidad, limitando con ello su uso.
Se ofrecen con identificación del usuario y también de forma anónima, el límite máximo de éstas últimas suele ser bastante menor a las anteriores.
Al igual que las anteriores, se expiden en las entidades bancarias, y en muchas se exige ser cliente de la misma.
El funcionamiento es similar al de una tarjeta Visa o Mastercard.
Servicios de prepago
Funcionan prácticamente como una tarjeta monedero. Para comprar con este sistema es preciso que el sitio web acepte esta forma de pago.
Las cuentas para comprar son gratuitas y la recarga también, pero tienen comisiones si se quiere retirar el dinero o realizar otra operación.
Hay que aportar los datos de una cuenta bancaria o de las tarjetas Visa o Mastarcard.
Ejemplos: Paypal. Epagado. No está de más una visita por estos sitios para conocer mejor su funcionamiento.
Pagos por móvil
Ya no se utiliza solamente el móvil para pagar las descargas de logos, melodías y juegos. Muchas páginas ofrecen esta posibilidad para cobrar sus contenidos. Un ejemplo claro es Softonic, que garantiza descargas de programas libres de virus enviando un mensaje sms.
Aunque las formas descritas anteriormente son las más comunes, no hay que descartar otras que pueden darse: Contra reembolso. Giro postal o telegráfico. Depósito en cuenta corriente. Western Union.
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